- Según este rastreador, que mide el crecimiento de los salarios negociados, incluidos los pagos excepcionales, distribuidos a lo largo de doce meses, el crecimiento salarial fue del 4,7% en 2024, sobre la base de una cobertura promedio del 48,2% de los empleados en los países participantes, y del 3,3% en 2025, basado en una cobertura promedio del 40,5%
De su lado, el indicador de seguimiento salarial sin suavizar los pagos únicos indica un crecimiento salarial negociado promedio del 4,8% en 2024 y del 2,8% en 2025.
Esta marcada tendencia a la baja del rastreador salarial en 2025 refleja en parte el impacto mecánico de los grandes pagos únicos, que se abonaron en 2024, pero se eliminan en 2025, y la naturaleza anticipada de los aumentos salariales en algunos sectores en 2024.
De tal modo, el indicador de seguimiento salarial que excluye el efecto de los pagos únicos indica un crecimiento salarial negociado del 4,1% en 2024 y del 3,9% en 2025.
En cuanto a la evolución trimestral, el rastreador del BCE, incluyendo pagos excepcionales distribuidos a lo largo de doce meses, apunta a una subida del 1,547% en el cuarto trimestre de 2025, ligeramente por encima del 1,45% anticipado el mes pasado, aunque muy por debajo del 5,268% del incremento correspondiente al último trimestre de 2024.
De este modo, la herramienta del BCE proyecta que las subidas salariales se moderarán desde el 4,820% estimado para el primer trimestre de 2025 al 4,442% en el segundo trimestre del año y al 2,249% en el tercer trimestre para limitarse al 1,547% en el tramo final de 2025.
En términos mensuales, el rastreador predice también una brusca desaceleración de las subidas salariales a partir del verano, ya que los incrementos se irán moderando desde el 5,35% de diciembre de 2024 al 4,22% en junio, a partir de cuando frenarán sustancialmente, con una previsión del 2,77% en julio y del 1,344% para diciembre de 2025.
El pasado jueves, el Consejo de Gobierno del BCE decidió bajar nuevamente en 25 puntos básicos los tipos de interés, de forma que la tasa de depósito (DFR) pasó al 2,75%, la de referencia para sus operaciones principales de refinanciación (MRO) al 2,90%, y la de la facilidad de préstamo (MLF) al 3,15%.
Asimismo, la presidenta de la entidad, Christine Lagarde, subrayó en rueda de prensa que el proceso de desinflación "está bien encaminado", añadiendo que el incremento de los salarios se está moderando, por lo que confía en que la tasa de inflación vuelva al objetivo de medio plazo del 2% en el transcurso de este año.
Sin tener en cuenta los pagos excepcionales, el rastreador salarial del BCE contempla una desaceleración algo menos intensa de las subidas, que se irán moderando desde el 4,68% del último trimestre de 2024 al 2,96% para final del año 2025.
Fuente: EuropaPress